A quienes nos gusta mucho el chocolate, el Brownie es la gloria. A pesar de ser muy simple, es fácil cometer errores frecuentes que destrocen nuestras ilusiones más golosas.
Por eso queremos compartir con vos 6 tips para que tu brownie salga perfecto a la hora de cocinarlo.
De entrada hay que decir que no existe una receta ideal o mágica de brownie. Cada uno puede tener su favorita, pero es importante saber que existen muchas, muchísimas variantes.
Estos tips se pueden aplicar a cualquier receta, pero a nosotros nos gusta aplicarlas al tipo de brownie que consideramos el más auténtico: crujiente por fuera, húmedo por dentro.
1. Aprende a elegir bien la receta
Preparar por primera vez una receta que nunca hicimos lleva tiempo y en reposteria mucho mas. Hay que tener cuidado a la hora de elegir cual haremos, asi nos aseguramos de que no haya errores, como falta de ingredientes o pasos.
Por ejemplo, una receta clásica de brownie suele tener mucha azúcar; si nos gustan dulces pero no empalagosos sabremos que tendremos que rebajar las cantidades o buscar una fuente alternativa.
Si esperamos obtener pequeños trozos de chocolate esponjoso, nos interesará una receta que incorpore más cantidad de harina y algún agente leudante como bicarbonato o polvo de hornear.
Cuando una receta indica que hay que batir bien los huevos con el azúcar, posiblemente la masa saldrá abizcochada. Si lo que queremos es un señor brownie del tipo volcan, probaremos recetas en las que la proporción de ingredientes húmedos sea superior a los secos.
2. Elige los ingredientes de la mejor calidad para preparar el mejor brownie
El brownie clásico se compone de muy pocos ingredientes que cualquier pastelero apasionado suele tener en su cocina. Pero es importante confiar en la mejor calidad, ya que será la clave del sabor y la textura final.
Por ejemplo, huevos super frescos, una exquisita manteca, azúcar especial para pastelería, no es excluyente, pero lo mas blanca posible, ojo, hoy en día estan de moda el azúcar negro, rubia y mascabo, le daran un sabor y textura diferente, extracto de vainilla de buena calidad, cacao amargo amargo amargo, nada de polvo para chocolatada.
Ahora sí, el momento de la verdad, el ingrediente especial cuya calidad no podemos escatimar es, sin duda, el chocolate.
Un buen brownie es puro chocolate, por eso es fundamental invertir en el mejor que podamos adquirir.
Claro que va mucho en gustos y marcas, pero lo importante es que sea chocolate con un alto porcentaje de cacao, poco o nada de azúcar y sin ningún añadido raro.
Evitemos las tabletas de chocolate para postres o los típicos chocolates de cobertura, suelen tener menos sabor y llevar grasas extras añadidas al margen de la manteca de cacao.
3. No caigas en la tentación de reducir las calorías
Vamos a ser muuuy sinceros en este aspecto: un buen brownie es un postre pesadito.
Claro que podemos intentar hacerlo menos pecaminoso reduciendo el azúcar o la cantidad de manteca, pero debemos tener cuidado cuando alteramos las cantidades de una receta.
Hoy en día hay muchas versiones alternativas de brownie “mas saludable” en las que cambiamos la materia grasa y el azúcar por aceite de coco, margarina vegetal, endulzantes como Stevia, pasta de maní, entre otros. El resultado puede ser muy bueno, pero si buscamos el brownie perfecto debemos aceptar que no va a ser ligero.
4. Conoce tu horno al máximo
No parece importante, pero si, debemos tomarnos el tiempo para conocer y dominar nuestro horno en casa.
Todos se comportan de forma diferente ya sean a gas o eléctricos, pueden variar la temperatura, los tiempos del precalentado, entre otras cuestiones que pueden terminar afectando nuestras preparaciones y en la pastelería es una cuestión muy delicada ya que puede significar el éxito o el fracaso de nuestra receta.
5. Comprueba a tiempo si están listos para sacar
La temperatura estándar para hornear masas básicas en pastelería ronda los 180ºC, pero hay recetas de brownie que piden subir hasta 200ºC, reduciendo el tiempo de cocción, para crear una capa crujiente exterior. Sea como sea, es mejor no alejarse mucho y revisar cómo está cuando haya pasado la mitad del tiempo.
Unos minutos antes de llegar al total de tiempo es ideal introducir un palillo o cuchillo en el centro, debería salir un poco manchado y con pequeñas miguitas, pero no masa líquida. No queremos un brownie crudo pero tampoco pasado y seco, no nos olvidemos que el interior continuará cocinándose un poco más una vez fuera del horno.
6. No seas ansioso a la hora de probar el mejor brownie
Seguramente tu cocina estará envuelta en un exquisito aroma a manteca y chocolate, el deseo de cortar tu postre será casi irresistible. Pero la paciencia será recompensada.
Si crees que el brownie ya está en su punto justo puedes colocar la fuente sobre una bandeja fría con hielos para cortar la cocción, o simplemente esperar unos minutos a que se temple, así podremos sacar el brownie entero ayudándonos del papel (no olvidemos colocar papel manteca en nuestro molde) sin retirarlo todavía, para dejarlo sobre una rejilla.
Una vez que esté a temperatura ambiente lo ideal es envolverlo en film y llevarlo a la heladera un rato, lo ideal una hora. Cuando cortes y le des el primer mordisco, sabrá a gloria.
¿Y qué pasa si nos gusta el brownie templado con una bocha de helado? Nuestro consejo es cumplir con el reposo de heladera y darles un toque de calor antes de servir, puede ser en el microondas muy suave o el calor residual del horno nos pueden servir.
El brownie es toda una tentación de la que no conviene abusar, pero si vamos a comerlos en una ocasión especial, merece la pena hacerlo bien. Con estos 6 tipsy muchas ganas conseguiremos seducir a todo el mundo con unos brownies irresistibles.
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